Todos han oído las promesas de las dieta dexosidante más comunes que existen hoy en día. «Pierde 2 kilos en un día» o «Limpia tu cuerpo con este zumo» son algunas de las más comunes que se ven y se oyen en nuestra cultura. Está claro que la gente quiere perder peso o quiere limpiar su cuerpo de quién sabe qué. Eso no es ninguna novedad, pero lo cierto es que mantener tu hígado libre de toxinas en la medida de lo posible te prestará algunos favores a tu salud.
El hígado es el encargado de mantenerte bien. De hecho, realiza más de 400 funciones en tu cuerpo. Examina cada cosa que entra en tu cuerpo y utiliza lo que puede y se deshace de lo que no puede, por lo que es importante mantener las cosas que entran que tu cuerpo puede utilizar, en lugar de las cosas que tiene que filtrar porque las reconoce como invasores dañinos.
Cuando su hígado se ve abrumado por la carga que debe eliminar constantemente en lugar de utilizarla, puede experimentar:
- Pereza
- Fatiga
- Aumento de peso
- Dolores de cabeza
- Digestión irregular
- Dolor en el lado derecho
Decoloración de la piel
No es divertido, ¿verdad? La optimización de su dieta con alimentos frescos, a base de plantas es un gran lugar para comenzar a mantener su hígado limpio y saludable, pero aparte de eso, algunas otras cosas importantes pueden ayudar a mantener su hígado libre de la sobrecarga tóxica.
Aquí hay cinco formas realistas (no dietéticas) para desintoxicar tu hígado, ya sea que estés entrando en un estilo de vida saludable por primera vez o que sólo necesites una puesta a punto regular antes de la temporada de fiestas:
1. Deja el alcohol
Escucha, no importa lo que digan esas afirmaciones sobre la salud del vino tinto, todo el alcohol es una mala noticia para tu pequeño hígado. No le gusta nada, ni siquiera el que está repleto de más antioxidantes que el resto. Lo siento, merlot. El alcohol es una toxina en cualquiera de sus formas y tu hígado utilizará una gran cantidad de energía para tratar de deshacerse del alcohol y poder purificar tu sangre.
Durante este proceso, puede consumir una buena cantidad de energía metabólica, lo que a menudo conduce al aumento de peso, la pereza, la fatiga y, sí, la somnolencia. Además, no todas las cervezas y vinos son veganos de todos modos, así que ¿por qué no evitar todo lo malo en un solo paso?
2. Enjuágalo con H20
A tu hígado le gusta estar limpio (¡como a ti!) y ¿qué mejor que mantenerlo limpio con agua fresca y alcalinizante? El agua contiene minerales naturales cuando procede de una fuente saludable (no de aguas del grifo cloradas), así que utiliza agua de manantial o de pozo siempre que puedas, o consulta el agua de tu ciudad para ver si es segura para el medio ambiente (algunas zonas son mejores que otras). Además, utiliza un sistema de filtración de agua que elimine las partículas de carbón y cloro siempre que sea posible.
Añade un chorrito de limón a tu agua para añadir aún más propiedades alcalinizantes y de limpieza. El limón y todos los cítricos contienen vitamina C y minerales que potencian las funciones corporales y mejoran el proceso de limpieza, barriendo los desechos. Limpiar el hígado es como darle a su cuerpo un buen prelavado para que su sangre se mantenga en niveles óptimos de pH. Intenta tomar tantos vasos al día como puedas o bebe infusiones sin cafeína como segunda opción.
3. Come los mejores alimentos posibles
No es necesario que cuente las calorías para cuidar su hígado, pero sí debe comer alimentos de alta calidad. Esto significa comer alimentos orgánicos y frescos siempre que sea posible, como verduras de hoja verde repletas de magnesio, clorofila y vitaminas A y C, junto con verduras frescas y frutas frescas cuando sea posible. Comprar productos orgánicos es importante, pero es especialmente importante para tu hígado, ya que los pesticidas, herbicidas y fungicidas tonifican el hígado y pueden incluso causar cáncer. Si no puedes permitirte todo lo orgánico, compra lo que esté en oferta y haz lo que puedas.
4. Coma las grasas adecuadas
Su hígado es responsable de producir la bilis que descompone las grasas, por lo que un área de su dieta que debe asegurarse de no olvidar es el tipo de grasas que come. El consumo de grasas saludables como las almendras, el coco, las nueces, el cáñamo, la chía y el lino, junto con las semillas de calabaza y girasol, las aceitunas y el aguacate son las mejores fuentes de grasa para su dieta. Evite las grasas animales que conducen a la inflamación de las arterias y evite los aceites vegetales (como el maíz y la soja) a toda costa.
5. Elija suplementos inteligentes
También es importante elegir los suplementos de forma selectiva. No se limite a tragarse una píldora que le prometa buena salud. Las vitaminas del grupo B de alta calidad (elija una marca de origen vegetal) y el selenio son importantes, ya que ayudan a metabolizar sustancias en el cuerpo que ayudan a mantener su hígado sano. Las hierbas como el cardo mariano y la hoja de alcachofa también ayudan a limpiar el hígado.
Puedes comprar un multivitamínico integral a base de plantas, un suplemento de vitamina B o comprar una fórmula especializada de apoyo al hígado. Si bien no es 100 por ciento necesario, se ha encontrado que ciertas vitaminas B y hierbas como las mencionadas aquí apoyan al hígado fuera de una dieta saludable.